Letras que son porción de vida,- en ellas, vivimos colores, sabores, y todas sus fragancias,- la vida al igual que un fruto, nos regala sus entrañas dulces, como también en algún mordisco nos demuestra que puede ser amarga.
Cielo, océanos, campos... lavandas, turquesas y esmeraldas... en los agujeros negros de unos ojos, en el remolino fiero el remanso de paz de epopeyas muertas... Deme usted una violeta para que disfrute de su aliento marinero... Lejos, muy lejos...
5 comentarios:
Cielo, océanos, campos... lavandas, turquesas y esmeraldas... en los agujeros negros de unos ojos, en el remolino fiero el remanso de paz de epopeyas muertas... Deme usted una violeta para que disfrute de su aliento marinero... Lejos, muy lejos...
Una epopeya en sí, el breve poema; donde rememoras seguramente, bellezas que nos suele dar la vida.
Muy bueno. Saludos desde Buenos Aires.
Juan.
Te devuelvo la visita y me amarro a la estela de tus letras,
Saludos.
Cuantas cosas desata esa señora melancolía, felicitaciones Casper
saludos
Me halagan sus comentarios, gracias a todos.
Y en especial si les ha gustado.
Un abrazo
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